El pasado 14 de febrero, un meteorito cayó en la ciudad italiana de Matera, al sur del país. Según los primeros resultados de las investigaciones llevadas a cabo por los expertos del Instituto Italiano de Astrofísica, este meteorito tendría la misma edad que el sistema solar, es decir, unos 45,000 millones de años.
El impacto del meteorito, que se produjo a una velocidad de 300 kilómetros por hora en el balcón de la casa de un concejal, es uno de los tres aerolitos que impactaron en la Tierra la semana pasada, junto con otro en Francia y otro en Texas.
El meteorito de Matera, apodado popularmente como San Valentín, fue bautizado por los científicos como «Matera», en honor a la ciudad donde cayó. Los investigadores explican que este meteorito podría ser una condrita procedente del cinturón principal de asteroides del sistema solar, y que su estudio puede resultar muy valioso debido a que varios de sus fragmentos cayeron en una vivienda sin tocar suelo terrestre, evitando su contaminación.
Uno de los aspectos más destacados del hallazgo del meteorito en Matera ha sido la posibilidad de observar con detalle su trayectoria y órbita, gracias al sistema de videovigilancia de la atmósfera y los meteoritos llamado «Prisma», que se activó durante el impacto del meteorito. Los expertos han destacado que este tipo de sucesos son excepcionales, ya que desde 1960 se han registrado unos 40 impactos de meteoritos en la Tierra, y que es poco probable que se produzca algo similar en el futuro.
En resumen, el impacto del meteorito en la ciudad italiana de Matera ha sido un acontecimiento extraordinario para la comunidad científica, ya que ha permitido obtener información valiosa sobre la composición química y mineral de este cuerpo celeste, así como sobre su trayectoria y origen. Sin duda, este descubrimiento contribuirá a mejorar nuestra comprensión del universo y su evolución a lo largo del tiempo.